Modernización de aplicaciones, indispensable para competir y posicionarse en el mundo digital

Escribe Eduardo Sarmiento, Practice Country Lead de Baufest

Día a día las aplicaciones móviles cobran mayor relevancia para las organizaciones, las que hoy las reconocen como una herramienta clave para competir en un mercado cada vez más digital, donde la experiencia de uso juega un papel fundamental en la percepción de la imagen de marca de la compañía.

Por ello, no es de sorprender que el alcance de usuarios de internet móvil siga aumentando en el país. Según estadísticas del Digital 2021 Global Overview Report, el año pasado se registraron 15.78 millones usuarios de Internet, lo que representa el 82.3% de la población. Además, según el informe, 98.8% de los chilenos que están activos en las redes sociales, acceden utilizando sus dispositivos móviles. Por otra parte, Chile figura como el segundo país con mayor crecimiento digital en Latinoamérica, con un 71%.

Este incremento constante, que también ocurre en países como México, Perú y Argentina, refleja el avance en la transformación digital que atraviesan empresas y gobiernos, los cuales requieren de aplicaciones seguras, flexibles y que incorporen nuevas tecnologías, como la Inteligencia Artificial (IA) o el análisis de datos, lo que permite mejorar la experiencia del cliente.

De acuerdo con el estudio The State of Application Modernization, alrededor del 70% de las organizaciones dijo que al menos una de cada cuatro aplicaciones se está modernizando, lo cual refleja que la migración es indispensable para mantenerse a la vanguardia y responder con agilidad a las nuevas necesidades.

A la hora de considerar la realización de este tipo de proyectos, las personas juegan un papel central. La investigación revela que la satisfacción del cliente es el principal motivador (54%), seguido de la eficiencia y satisfacción de los empleados (47%).

También hay consecuencias negativas que impulsan la decisión. Así lo indican el 56% de los líderes de TI, que reconocen que retrasar la modernización de sus aplicaciones provocó que no se alcanzaran los requisitos de cumplimiento, mientras que el 51% señaló que no podía escalar los servicios críticos cuando era necesario.

Ahora bien, hay que tomar en cuenta que las plataformas que serán mejoradas ya están operativas, lo cual implica una serie de desafíos: entender las necesidades de los usuarios para garantizar la adopción, mantener la disponibilidad para asegurar la continuidad del negocio y realizar una transición segura y controlada que contemple la convivencia de los sistemas.

En este marco, llevar adelante un proyecto de modernización exitoso requerirá de una estrategia de migración que segregue el trabajo en etapas, priorizando los aspectos críticos (funcionales y/o tecnológicos) y de un abordaje metodológico basado en la gestión de riesgos.

Si bien este es un proceso complejo que requiere de planeación de expertos tecnológicos, también representa una inversión con resultados de impacto. La modernización implica una revalorización de los productos digitales y mejora la percepción de la imagen de marca. Además, optimiza los procesos y disminuye los costos de mantenimiento.

Que Chile siga creciendo en el mercado del desarrollo de aplicaciones móviles en Latinoamérica, demuestra que el país avanza y afronta con tecnología los nuevos retos de las organizaciones. En este contexto, la modernización les permitirá mantenerse vigentes y fuertes ante la competencia, así como también atraer y fidelizar clientes.

(*) Eduardo Sarmiento: Practice Country Lead de Baufest